El dolor es casi un recuerdo en las clínicas dentales modernas, lo que hace que, poco a poco, el miedo al dentista se vaya reduciendo.
A esto ha contribuido en gran medida el cambio de hábitos de la población, que ya no acude al dentista cuando existe un problema, generalmente implicando dolor, sino que visita al dentista de forma regular para la prevención y revisión.
De esta forma, los niños ya no tienen que sentir la visita al dentista como un acto traumático.
¿Qué es un odontopediatra?
El odontopediatra es un profesional de la odontología que se ocupa de la salud bucal desde la infancia y de la minimización del riesgo de que los más pequeños desarrollen odontofobia.
El odontopediatra debe desarrollar aptitudes y actitudes especiales, enfocadas al análisis del comportamiento del niño desde el momento en que llega a la clínica hasta que se sale de ella.
La experiencia en casos similares y su formación le dará la clave para orientar la visita hacia la creación de un espacio de seguridad que permita una comunicación fluida con el niño. Como consecuencia de esto, el niño desarrolla una especial confianza hacia su odontopediatra que permite abordar los tratamientos sin miedo.
Sin olvidar que la responsabilidad de la correcta salud bucal de los pequeños recae en sus padres, por lo que otra de las tareas del odontopediatra es la de formar a los padres en la correcta prevención de problemas dentales y el refuerzo de la visita al dentista.
Hábitos positivos en la preparación de la visita al dentista
- Ser tratado por un odontopediatra. Como hemos explicado anteriormente, la formación y experiencia otorga al dentista especialista en niños la sensibilidad para ganar la confianza del niño, así como conocimientos sobre afecciones específicas en la infancia y su tratamiento.
- Explicarle la importancia de los dientes. Dedicar un tiempo a explicar que los dientes, a diferencia de otras partes de nuestro cuerpo, no son para siempre si no se cuidan. Recibir explicaciones sobre el papel de las bacterias en nuestra boca y por qué deben ser eliminadas le hará entender la importancia de la higiene bucal periódica.
- Canciones y vídeos. Los niños, en edades tempranas, reciben de una forma mucho más efectiva la información en forma de juego. La música, gesticulación y el baile son elementos que facilitan el aprendizaje.
- Visitas periódicas. Convertir las visitas en algo rutinario, donde realizamos una exploración que no genera ningún tipo de intervención, unido a la pedagogía del odontopediatra, hace que el niño sienta seguridad en la consulta.
- Acompaña a tu hijo en todo momento. Eres la persona que le protege. Si tú estás allí, nada malo le puede pasar y, cualquier cosa que suceda, sabe que es por su bien.
- Explícale el proceso, ayúdale a visualizarlo. Realizar una explicación de la revisión paso a paso al niño hará que este sepa exactamente qué sucederá, eliminando de su imaginación escenas que nunca sucederán generadas por el miedo a lo desconocido.
Hábitos negativos en la preparación de la visita al dentista
- Demorar la primera visita al dentista. La demora de la primera visita al odontopediatra hasta que se presente un posible problema hace que el niño asocie la visita a intervenciones, lo que genera un rechazo posterior. Acostumbremos al niño a visitas rutinarias de prevención.
- Mostrar nerviosismo antes y durante la visita. Eres su referente. Si el niño te percibe nervioso no tardará en preguntarse el motivo de tus nervios y en imitar tu comportamiento.
- Hacer comentarios negativos. El poder del adulto sobre el niño es enorme. Si este escucha, de boca de sus papás o de un extraño, momentos traumáticos vividos en la consulta de un dentista, tomará buena nota y creerá que con él se repetirán dichos momentos.
- Comentarios sobre la innecesidad o inutilidad de la visita al dentista educarán a nuestros hijos en la pereza y el aplazamiento de la visita al dentista lo que, de nuevo, conduce a la visita al dentista cuando ya se ha producido la afección y es necesaria una intervención que puede dar lugar a la odontofobia.
- Amenazar con visitar al dentista. No, la visita al dentista no es un castigo. No utilices la visita al dentista como una forma de amenaza a tu hijo para que cumpla con sus obligaciones, porque le estás transmitiendo que supone algo desagradable y evitable.
ARC dental
En ARC Dental ofrecemos a los pacientes más pequeños de la familia un servicio personalizado de la mano de un equipo especialista en casos bucodentales de niños y adolescentes. Nuestro objetivo es ofrecer los tratamientos menos invasivos y más efectivos a estas edades para garantizar el desarrollo de una boca sana, estableciendo las bases de una adecuada salud oral que le permitan al adulto mantener una sonrisa estética y funcional por años.
Es importante en nuestra clínica ofrecer la mayor tranquilidad y seguridad con nuestros tratamientos. Por ello, contamos con un equipo especializado en técnicas de odontología pediátrica y ortodoncia preventiva y correctiva que se sigue formando para aplicar la última tecnología y garantizar resultados excelentes y duraderos.